domingo, 23 de abril de 2023

Historias amarillas

Un dia en que estando sin empleo y con la sombra de los años llegando , encontre un amarillo para trabajar. 
El anuncio provenia de una red social. Me presente ante el propietario del amarillo   me pidio tal cual documentación y sin mucho hablar . Ya era el operador de un amarillo.
Entusiasmado lleve el zapatico a casa , le realice la limpieza ya era noche y solo hasta el dia siguiente iniciaria mis labores. El mono se acerco a mi y se decia y me preguntaba. ¿ Ese señor le entrego un carro sin conocerlo a usted siquiera ?
¡'Asi es ! Respondía mientras seguia  limpiando.
No recuerdo cuanto dinero gané el.primer dia ¿ Si es que lo gane ?
Recuerdo claramente que al tercer dia , en una mañana lluviosa mientras llevaba a la universidad a una jovencita. Que a propósito era gestora en parte de mi futuro como taxista. " Estrelle el amarillo ". 
Vaya cosas, ella golpeo su cabeza con el panorámico al punto de romper este, finalmente salio con algunas contusiones sin gravedad. 
Aunque llevaba algunos años radicado en esta ciudad no la conocia. 
Fue el inicio de un recorrido que aun no termina.
Había estado acostumbrado a una vida totalmente diferente,  encerrado gran parte del tiempo en labores de serigrafia . Arte que habia aprendido al lado de mis hermanos , asi que no era muy avitual la calle para mi.
En esta profesión de taxista aprendes a conocer la realidad de esta sociedad. 
A ser un poco más humano quizá y al mismo tiempo creas un mundo de conformismo .


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